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Mientras se discute en el mundo cómo será el trabajo del futuro, emergen las soluciones legaltech como la oportunidad para potenciar el trabajo de los abogados.

En el bestseller La segunda era de las máquinas, los autores Erik Brynhofsson y Andrew McAfee sostienen que cada vez más las computadoras están reemplazando tareas que eran típicamente consideradas humanas.

Sin embargo, los autores son optimistas respecto al futuro. Según su visión, “las personas deberían centrarse en las tareas y trabajos donde tienen una ventaja comparativa sobre las computadoras, dejando a estas el trabajo para el cual están mejor capacitadas”.

La legaltech forma parte del futuro del trabajo de los abogados

Según un informe del Foro Económico Mundial, se espera que 40 % de las habilidades básicas de los trabajadores actuales cambie en los próximos cinco años.

Ezequiel Braun Pellegrini, CEO y fundador de Brevity, explica en un artículo sobre la revolución tecnológica y el futuro del trabajo que: «Para tener una idea de la magnitud de este fenómeno, en los próximos nueve años más de 100 millones de personas deberán cambiar de ocupación (no de puesto de trabajo), según un estudio realizado por Mckinsey en ocho de los principales países de la economía mundial».

Una definición del Banco Mundial, explica Braun Pellegrini, que habla de la naturaleza cambiante del trabajo remarca que esta «exige capacitación permanente, posibilidad de adaptación y aptitudes que cruzan profesiones y carreras. Ya no sirve tener habilidades blandas sin conocimientos sobre tecnología y viceversa».

Esto implica la necesidad de que las industrias desarrollen hojas de ruta que cuenten con información relacionada con oportunidades de transición para trabajadores, programas de capacitación y desarrollo de talento dentro de la organización. 

De acuerdo al CEO de Brevity, «profesionales como los abogados debemos adaptarnos a los cambios tecnológicos y agregarle valor a nuestra tarea con las principales herramientas digitales, que pueden facilitar y mejorar nuestro día a día con los equipos de trabajo y los clientes».

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Un reporte de la consultora BCG (Boston Consulting Group) apunta que la eliminación de tareas rutinarias y repetitivas en profesiones legales abre la posibilidad de que los empleados asuman roles más estratégicos. 

Esto también ilustra en cómo la automatización afectará no solo a los trabajos manuales, sino también a las ocupaciones administrativas.

Las habilidades humanas básicas, como la empatía, la imaginación, la creatividad y la inteligencia emocional -aquellas que la tecnología no puede reproducir- serán más valiosas. 

A la vez, la mayor demanda de profesionales legales data-driven le suman a estos recursos el aporte que los datos organizados le ofrecen para diseñar sus estrategias de trabajo de la manera más eficiente y redituable.

Legaltech, la oportunidad para potenciar el futuro del trabajo de los abogados

Con la disrupción digital, los estudios de abogados tradicionales tienen que navegar en esta “nueva normalidad”. Esto representa tanto desafíos como oportunidades para incorporar nuevos servicios. 

Por ejemplo, la capacidad de utilizar la inteligencia artificial (IA) para colaborar con el asesoramiento jurídico es una de ellas. Las posibilidades de Internet, permitirá llevar la práctica a otro nivel para los profesionales del Derecho. 

La capacidad tecnológica avanzada, con almacenamiento de datos y potencia informática, permite un acceso fácil e inmediato a la investigación jurídica de calidad como nunca antes. 

A su vez, las prácticas multidisciplinarias (MDP) emergen como oportunidades de ofrecer servicios más disruptivos. 

Esto puede traducirse en una nueva oferta de asesoramiento jurídico para impuestos, transacciones comerciales, soporte en litigios, ciberseguridad, planificación comercial, gestión de riesgos y cumplimiento normativo. 

Los abogados tradicionales pueden combinar su experiencia en el campo del Derecho con las nuevas aplicaciones que los proveedores legaltech ofrecen. 

Habilidades para prosperar en un mundo digital

Para PWC, la clave para adaptarse a este nuevo entorno se encuentra en el upskilling, verbo en inglés que hace referencia a  “actualizar las habilidades”. 

De acuerdo con el estudio, mejorar las habilidades no consiste solo en enseñar a las personas cómo usar un nuevo dispositivo. «La experiencia de mejora de las habilidades implica aprender a pensar, actuar y prosperar en un mundo digital que es sostenible en el tiempo.” 

Desde el punto de vista de la consultora, no se trata solo de desarrollar habilidades relacionadas con el trabajo sino de anticipar las habilidades adecuadas para el futuro. Es decir, establecer una base cultural que abarque la mejora de las habilidades y el desarrollo de un aprendizaje. 

Demandas de capacitación para el abogado del futuro

Estas capacidades mejoradas por la tecnología se alinean con las demandas de las realidades comerciales modernas y brindan a los consumidores soluciones multidisciplinarias para nuevos desafíos. 

Las prácticas multidisciplinarias están creciendo rápidamente en países donde la ley permite que las firmas de abogados formen asociaciones con firmas de contabilidad y consultoría corporativa.

Con los avances en las soluciones legaltech, los abogados del futuro, cualquiera sea su especialización, se centrarán en tomar decisiones ponderadas y bien informadas en nombre de sus clientes, con la tecnología ayudando a brindar un servicio legal más rápido y mejor.

Sin duda, los abogados necesitarán dominar las habilidades digitales de resolución de problemas a través de la capacitación continua. 

También necesitarán adquirir nuevas habilidades relevantes y la capacidad de complementar los roles que la IA y otras tecnologías pueden manejar mejor. 

Ventaja sobre las computadoras

Como resaltan los autores de La segunda era de las máquinas, la respuesta está en concentrarnos en realizar tareas para las cuales las computadoras no son buenas “como leer las señales emocionales de un cliente frustrado”.

 Esas tareas, comentan, han crecido en las últimas décadas y “se han mantenido relativamente bien”. 

Esta realidad es un llamado para que los profesionales del derecho se capaciten y se enfoquen en lo que hacen mejor que las computadoras. Aprovechando el desarrollo de la legaltech como una oportunidad para potenciar el ejercicio de su profesión.

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