3 consejos para aprovechar mejor el tiempo de los abogados

Estos 3 consejos para aprovechar mejor el tiempo de los abogados están orientados a ayudarlos a alcanzar sus objetivos sin retraso ni el estrés que conllevan las tareas que no agregan valor a su vida personal ni profesional.

Lo que cobra un abogado por su hora de trabajo incluye múltiples factores, que van desde su formación, experiencia, los gastos derivados del ejercicio de su profesión. Sin embargo, en un mundo profesional cada vez más competitivo optimizar la gestión del tiempo es una práctica necesaria para que los abogados puedan mantener la calidad del servicio que ofrecen.

La adopción e implementación de nuevas tecnologías, así como la mejora continua de las formas de trabajo dentro de una organización, impactan en la calidad del servicio que se ofrece y, por tanto, en el valor agregado de cada hora que se factura a los clientes.

Los departamentos legales de las empresas y los estudios de abogados atraviesan un momento de modernización en el ejercicio de su profesión. Esto significa innumerables oportunidades de crecimiento agregando valor, velocidad y eficiencia en el trabajo que realizan.

Hacer que día sea más productivo a través de estrategias de optimización del tiempo ayuda a desarrollar una práctica profesional enfocada en ofrecer el mejor servicio posible a los clientes y aprovechar al máximo el potencial del capital humano disponible.

Estos son tres consejos prácticos para aprovechar al máximo cada día.

1. Usar tecnologías para automatizar tareas jurídicas.

La primera estrategia para aprovechar mejor el uso del tiempo de los abogados es utilizar tecnologías que automatizan procesos jurídicos. Estos softwares utilizan computación en la nube, datos estructurados e incluso inteligencia artificial para ejecutar algunos procesos con un nivel de precisión muy alto.

Un ejemplo de digitalización dentro del Derecho argentino es el desarrollo del Laboratorio de Inteligencia Artificial de la facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires.

El organismo está desarrollando tecnología basada en Inteligencia Artificial para encontrar precedentes de casos, enviar oficios y notificaciones, elaborar informes, calcular los tiempos de los recursos judiciales y actuaciones administrativas.

Uno de sus casos de éxito es la utilización de la Inteligencia Artificial en las fiscalías de primera instancia en lo penal, contravencional y de faltas especializadas en violencia de género para los delitos de incumplimiento de cuota familiar.

Según reporta el Laboratorio, la Inteligencia Artificial “permite la automatización del sistema de denuncias, y la creación de resoluciones específicas y de documentos anexos a las resoluciones (en total 9 documentos), en 2 minutos”.

Podés conocer cómo avanzan los procesos de digitalización de la Justicia en la Argentina descargando el White Paper desarrollado por Brevity aquí.

2. Desarrollar flujos de trabajo inteligentes

Una organización que busca evolucionar, necesariamente debe desarrollar procesos que faciliten alcanzar sus objetivos y simplifiquen el trabajo a sus colaboradores.

De acuerdo a un artículo publicado en la revista Forbes, evaluar, documentar y formalizar los métodos de trabajo son buenas prácticas para mejorar la eficiencia.

Otro consejo es “establecer metas en reducción de tiempos por tarea y así reconocer fallas en los flujos o ejecutores del proceso. De igual forma, puedes definir metas de tareas por día o departamento, lo cual ayudará a evaluar la eficiencia del flujo de trabajo y cada uno de los procesos”.

En el caso específico del Derecho, las tecnologías de automatización de documentos  ayudan a achicar el tiempo que se dedica a tareas repetitivas, su corrección y supervisión ya que reducen la cantidad de campos de texto que deben ser completados cuando se trabaja sobre modelos estandarizados, como, por ejemplo, los contratos.

En contraste con los procesadores de texto de texto convencionales, los programas de automatización especializados en tareas jurídicas pueden incorporar sugerencias, acceso veloz a archivos relacionados y correcciones específicas para el tipo de documento con el que se está trabajando.

Esto facilita las tareas tanto abogados senior como juniors, ya que sirve tanto para supervisar y corregir como para desarrollar los documentos que se utilizan en la práctica profesional.

Para lograr un flujo inteligente de trabajo dentro de un estudio jurídico o departamento de legales, la automatización de tareas repetitivas es solo el primer paso dentro de un flujo inteligente de trabajo.

Compartir los archivos con el resto del equipo, la posibilidad de dar distintos niveles de acceso a usuarios de acuerdo a las tareas que deben realizar e, incluso, revisarlos en línea de manera segura con los clientes forman parte de las necesidades básicas de un equipo jurídico eficiente en 2021.

3. Invertir el perder tiempo en aprender 

Decidir en qué se va a destinar el tiempo de los abogados puede funcionar como un gasto o como una inversión para una organización. Aprovechar el tiempo de los abogados también incluye dedicarle un espacio a profundizar o ampliar sus conocimientos.

La formación continua es una tendencia que se sostendrá en 2021 en las empresas como parte de su política interna.

Durante la crisis desatada por la pandemia de Covid-19 en 2020, las empresas conocieron de forma intempestiva su real capacidad de adaptación y resiliencia. Mientras que se elevó el valor de un equipo flexible, abierto al cambio y enfocado en la resolución de problemas, por otro lado, algunos esquemas tradicionales dentro del Derecho empezaron a ser cuestionados.

En junio de 2020 Stella Raventós, presidenta de la Asociación Española de Asesores Fiscales (AEDAF), declaró: “La digitalización va a suponer que los aspectos más rutinarios de nuestro trabajo perderán valor, porque las herramientas digitales se encargarán de ellos”.

De acuerdo a Raventós, la parte del trabajo que requiere conocimientos jurídicos será valorada, “y será la que el cliente esté dispuesto a pagar”.

En ese sentido, adquirir y adoptar capacidades tecnológicas es, a corto plazo, una inversión de tiempo que permite agilizar las tareas de poco valor agregado en el futuro.

De esa manera, los estudios y departamentos de legales pueden destinar más tiempo y recursos a tareas que sí aumentan su rentabilidad y prestigio formando a su equipo para desarrollar trabajo valioso y de calidad.