Estrategias para potenciar la colaboración en los estudios de abogados

Para los abogados  y sus clientes potenciar la colaboración dentro de los estudios jurídicos y departamentos de legales asegura mejores resultados, servicios de calidad y eficiencia en la gestión. 

De acuerdo con Forbes, “la función legal es mucho más que una colección de abogados cuyo cometido y rol es realizar lo que ellos identifican como trabajo legal».

En este sentido, «un estudio de abogados es un equipo diverso y mucho más amplio que trabaja de manera proactiva y colaborativa en beneficio de sus clientes.”

Es hora de analizar la utilidad que tienen para los clientes las distinciones artificiales que suelen hacer los estudios entre abogados, proveedores internos y otros proveedores de servicios, como tecnología.

Los clientes buscan  contar con soluciones integrales, rápidas, seguras y respaldadas por datos que les resuelvan sus problemas y los profesionales legales que trabajan de manera colaborativa están más cerca de poder asegurarles un servicio de calidad.

Por qué potenciar la colaboración entre abogados

Según Heidi Gardner, miembro distinguida de la Facultad de Derecho de Harvard y autora del libro Smart Collaboration: «Al colaborar verdaderamente, un equipo de abogados puede abordar problemas que nadie podría abordar individualmente». 

De acuerdo a la experta «la colaboración se produce cuando los trabajadores del conocimiento integran su experiencia individual para ofrecer resultados de alta calidad en cuestiones complejas».

La verdadera colaboración entre disciplinas supone que las personas aporten y combinen sus perspectivas y experiencia para resolver las necesidades de los clientes. De este modo, el resultado resulta ser más que la suma del conocimiento de las personas participantes. 

Las relaciones entre abogados y otros profesionales generalmente se extienden a lo largo del tiempo y a través de proyectos a medida que los participantes identifican nuevos enfoques e inician compromisos adicionales.

Además de ofrecer su experiencia, esta dinámica se genera cuando las personas también se ayudan, aconsejan, estimulan y motivan entre sí. 

El profesor del MIT Michael Schrage afirma que “los colaboradores exitosos no solo trabajan entre ellos; trabajan juntos a través de un espacio». 

El espacio compartido, ya sea físico, virtual o digital «es donde los colaboradores acuerdan crear, manipular, iterar, capturar y criticar conjuntamente las representaciones de la realidad que busquen descubrir o diseñar.”

La colaboración integra al equipo de trabajo de una organización y también a sus socios estratégicos, la cadena de suministro, los clientes y la sociedad.

Un conjunto que reúne sus habilidades y experiencias rápidamente para resolver desafíos complejos y urgentes. En general están compuestos por talentos diversos de diferentes unidades de negocios, geografías, generaciones, etc. 

Beneficios de las prácticas colaborativas en el derecho

Contar con un equipo integrado y trabajando de manera colaborativa brinda beneficios en más de un sentido. Potenciar la colaboración en los estudios de abogados fortalece la cultura interna.

Además, mantiene la comunicación abierta entre socios, asociados y asistentes. Las prácticas se hacen más ágiles y transparentes. La calidad del trabajo aumenta. Y, por tanto, potenciar la colaboración en los estudios de abogados permite atraer nuevos clientes.

En esta era, las demandas de los clientes están cambiando, quieren información casi de inmediato.

En una sociedad donde todo está más o menos a un clic de un botón de distancia, los estudios de abogados deben ser receptivos y rápidos. La eficiencia es clave, asegura la publicación Lawyer Monthly.

6 estrategias para potenciar la colaboración 

1 Fomentar la confianza entre las personas. 

El factor más importante para fomentar la colaboración es promover la confianza. Tanto a nivel relacional como aquella basada en competencias, es fundamental que exista confianza entre todos los integrantes de la empresa.

Siempre que sea posible, anime a los asociados a formar vínculos fuertes entre ellos y con los socios, no solo porque sus relaciones pueden ser importantes aceleradores para un equipo eficiente, sino también porque esa confianza impulsará sus esfuerzos de desarrollo comercial a medida que avanzan en la empresa. 

2. Promover el desarrollo de nuevas habilidades.

Como indicamos en nuestro artículo sobre el perfil del abogado del futuro es necesario que los profesionales se conviertan en “abogados en forma de T”, un concepto que se utiliza para mostrar el conjunto de habilidades necesarias para los nuevos desafíos.

La pata a de la T representa el área de conocimiento central de todos los abogados, básicamente una sólida experiencia legal. Por su parte, la barra horizontal de la T, más larga pero menos profunda, representa una apreciación y comprensión de otras disciplinas que incluyen tecnología, negocios, análisis y seguridad de datos.

3. Poner al cliente en el centro.

Para poder colaborar interdisciplinariamente, los abogados deben considerar su función desde la perspectiva del cliente, no solo desde la perspectiva puramente legal.

Los clientes esperan que los abogados sean proactivos para resolver problemas. Para brindar servicios de excelencia los abogados pueden trabajar en equipo con otros profesionales aliados, como por ejemplo: analistas de datos, ingenieros, tecnólogos, expertos en diseño y procesos, etc.

4. Ver a la tecnología como una aliada.

La tecnología es la columna vertebral que permite que las organizaciones diversas y geográficamente dispersas trabajen sin problemas para generar valor, transparencia y una experiencia positiva del cliente de extremo a extremo.

Se requiere trabajo en equipo que involucre a individuos, unidades de negocios, funciones y clientes para aprovechar el potencial transformador de la tecnología.

Uno de los principales valores y beneficios de la plataforma Brevity es el de facilitar el trabajo colaborativo entre abogados, clientes y otros colaboradores, como contadores y escribanos, ya que permite acceder a la información y compartirla de manera simple y segura.

5. Crear una cultura colaborativa.

Los líderes deberían crear un entorno en el que sea normal que las personas busquen y proporcionen información sobre los clientes.

Por eso, la comunicación interna es fundamental. El espacio verdaderamente colaborativo debe tener la capacidad para transmitir mensajes rápidamente. Se recomienda contar con plataformas y paneles de control compartidos.

También es importante incorporar conceptos como adaptación cultural, el trabajo en equipo, la gestión del cambio, la mejora de las habilidades, la conciencia cultural, la colaboración y el enfoque en el cliente.

6. Cuidar la seguridad de la información.

La seguridad es vital, especialmente en el ámbito legal. Con el aumento de los hackeos, las plataformas digitales colaborativas deben ser extremadamente seguras. En esta nota te contamos cómo podés pasar tu estudio a la nube y mantener seguros tus servidores.

Colaboración y el futuro de los abogados

Si el mundo actual, con sus desafíos complejos, ya presenta la necesidad de trabajar de manera colaborativa para poder resolverlos, en el futuro esta tendencia se profundizará.

Será muy difícil concebir una organización que no brinde servicios integrales y multidisciplinarios, sea del tipo que sea. 

La digitalización y la irrupción de nuevas tecnologías están moldeando los requerimientos legales de los clientes y también la forma de los estudios de dar respuestas innovadoras, ágiles y de calidad que agreguen valor. Como es de esperar, este nuevo paradigma impactará también en la formación de los abogados. 

Como indica Mark A. Cohen, presidente ejecutivo de Digital Legal Exchange, “para atender a los clientes digitales de manera competente, eficiente y exitosa, la función legal debe ofrecer más que abogados y trabajo legal.”

Los estudios de abogados hoy están llamados a expandir sus filas a negocios, tecnología, datos y otros especialistas. Es importante que los líderes incorporen buenas prácticas de gestión y herramientas para que los profesionales puedan integrar sus disciplinas y compartir la información.

Potenciar la colaboración en los estudios de abogados será la nueva medida del éxito en la medida que la profesión profundice la búsqueda por ofrecer mejores servicios a sus clientes y operar de manera más eficiente dentro de los estudios jurídicos y departamentos de legales.